«Dejen de burlarse de los veganos», escribe The New York Times
En un artículo de opinión reciente, el columnista del New York Times, Farhad Manjoo, instó a los lectores a que dejaran de burlarse de los veganos, quienes explicaron que tenían razón sobre la ética de abstenerse de los productos animales todo el tiempo. «Muchos de nosotros, incluido yo mismo, participamos en un ambientalismo indoloro y performativo», escribe Majoo. «Renunciaremos a las cañitas de plástico y tuitearemos apasionadamente que alguien debería hacer algo con respecto a la Amazonía, pero pocos de nosotros hacemos espacio en nuestra cosmovisión para reconocer el cadáver en la sala: la evidencia irrefutable de que nuestra adicción a la carne está matando al planeta en este momento». ante nuestros ojos «. Manjoo señala la hipocresía del lanzamiento de Popeye de su nuevo sándwich de pollo en un momento en que la selva amazónica se está quemando debido a la agricultura animal, reconociendo la» vida miserable, superpoblada, constantemente iluminada, de 40 días de duración de la fábrica típica pollo de granja y comida rápida «. Aunque admite que luchan para evitar los productos animales, Manjoo pide a los lectores que dejen de burlarse de los veganos. «Quiero decirles a que puedan dar una oportunidad a los veganos, a amarlos y celebrarlos en lugar de ridiculizarlos», escribe Majoo. “Necesitamos más voces veganas, porque en los grandes temas: la crueldad criminal de la agricultura industrial; la sensibilidad y la profundidad emocional de los animales alimenticios; el costo ambiental de la carne y la insostenibilidad de su ascenso global: los veganos están irrefutablemente en el lado correcto de la historia ”. Manjoo explica que los omnívoros clasifican a los veganos como“ predicadores ”solo porque su mera existencia expone la disonancia cognitiva que las personas experimentan cuando continúan apoyando a los animales. crueldad y destrucción ambiental al comer productos animales. “Los veganos tienen razón. Los veganos siempre tenían razón ”, escribe Manjoo. «Lo menos que puedes hacer es llenarlos de respeto y nuestra gratitud, porque se lo merecen».
